domingo, 28 de diciembre de 2014

Día 15 - Panza arriba. La historia de un pez

Cansado de dar vueltas en la pecera, el pez decidió ver las cosas distinto.
Se puso de costado, torcido y en vista de la inestabilidad y la imposibilidad de cerrar los ojos, decidió tomar todo el aire que pudo, lo depositó en su vientre y flotó panza arriba. Allí quedó por varios minutos.
Al principio se mareó mucho, pero aguantó y por fin pudo ver las cosas de otra forma, patas para arriba. Cuando se acostumbró, todo le pareció gracioso, las cosas caían para arriba y la gente caminaba pegada al techo. Todo lo que naturalmente tenía que crecer, se iba irremediablemente hacia abajo y realmente el pez creyó entender por fin el mundo. Vino su dueño y al verlo así lo creyó muerto. Lo sacó de la pecera y sin entermedios lo tiró por el inodoro.
Todo fue oscuridad y turbulencias, nada era gracioso entonces.
Los malos olores lo inundaban todo y la posibilidad de morir era palpable.
Hata que por fin volvió la luz, la oscuridad se disipó como así tambien los desperdicios. Nadó el pez río adentro y por fin sintió algo nuevo, no había más paredes de vidrio que lo retuvieran. El ambiente era peligroso, inprevisible pero tambien era grande su libertad.
Por fin las cosas cambiaron.
Ahora sí se veía todo distinto.